Por Verónica Gutiérrez
Colaboradora
RUPERT -- Miembros de la Sociedad de Adoración Nocturna de Rupert, también realizaron su Vigilia Anual de Acción de Gracias durante el mes de noviembre para agradecer a Dios por la cosecha del año que termina. Esta celebración incluyó una solemne procesión con el Santísimo Sacramento alrededor de las instalaciones de la Iglesia y la escuela de Saint Nicholas.
El Padre Camilo García, párroco de Saint Nicolás dirigió la procesión acompañado por el diácono José Medina y miembros de la comunidad que pertenecen al grupo de la Adoración Nocturna Local.
Sobre esta celebración, el Padre García señaló que el punto de referencia es Dios como fuente de la cosecha y de todas las bendiciones que disfrutamos. Como la frase de nuestro rito en la Santa Misa donde reconocemos que “es justo y necesario” que demos gracias a Dios por nuestras bendiciones.
El Padre García, explicó que la acción de gracias está en el corazón mismo de los misterios de la creación y la redención. Dar gracias a Dios juntos es la esencia de la vida. Esto es lo que Cristo reveló al hacer de la acción de gracias a Dios Padre el acto supremo de toda su vida y ministerio y de su sacrificio redentor en la Cruz.
Por eso, los primeros cristianos llamaban a su culto “acción de gracias”, que en la lengua griega del Nuevo Testamento es la palabra “Eucaristía”. Es en la Eucaristía de la Misa donde nos unimos a Cristo para ofrecer a Dios Padre todo lo que somos y todo lo que tenemos en el altar de nuestros corazones como familia de fe, como pueblo “sacerdotal”.
La Vigilia de las Espigas
Es una de las tradiciones establecidas por la Adoración Nocturna Mexicana y tiene un doble objetivo, primero dar gracias al Señor por los frutos y bienes de la tierra en la época de las cosechas y por otro dar a conocer la Adoración Nocturna en lugares o parroquias donde no está establecida o donde conviene incrementarla.
La celebración incluye lo fundamental que es la Adoración del Santísimo durante la noche y una procesión afuera de la iglesia para bendecir los campos y simbólicamente toda la actividad de los hombres.
En la ciudad de Rupert, el grupo de Adoradores Nocturnos fue creado por el Padre Francisco Godínez en su periodo de 2013 al 2021 primero como administrador y luego como párroco de Saint Nicholas.
A partir de entonces este grupo de adoradores locales se han unido a las tradiciones y costumbre de la Sociedad de Adoración Nocturna que se desarrolló a partir de la práctica de la adoración nocturna del Santísimo Sacramento durante la devoción de las Cuarenta Horas.
Un sacerdote de la ciudad de Roma, el padre Giacomo Sinibaldi, se inspiró para reunir grupos de hombres para orar en presencia del Santísimo Sacramento durante las horas nocturnas en las iglesias de Roma, donde se realizaba la devoción de las Cuarenta Horas. La respuesta a su idea fue tan entusiasta que en poco tiempo hubo grupos que se reunían para orar todas las noches del año en las iglesias donde estaba expuesto el Santísimo Sacramento.
Estos adoradores recibieron la aprobación eclesiástica y en 1810 nació la Sociedad de Adoración Nocturna. Su centro era la iglesia de Santa María en Via Lata en Roma. En 1851 la Sociedad fue aprobada como Unión Pía y en 1858 fue elevada al estatus de Archicofradía, con autoridad para establecer sociedades de adoración nocturna en otros lugares.
Durante los disturbios civiles de 1848, un monje carmelita, el padre Hermann Cohen, un judío converso obtuvo la aprobación del arzobispo de París para formar una Sociedad de Adoración Nocturna en la ciudad. En 1863, fundó una sociedad de adoración nocturna en Londres.
Desde Francia, la Sociedad se extendió en varias direcciones. Fue fundado en Madrid, España en 1877. Su crecimiento en España fue tan extraordinario que en poco tiempo había 500 centros con más de 100.000 miembros. Desde México pasó a Texas y California en Estados Unidos.
Hoy en día, la Sociedad de Adoración Nocturna está establecida en 36 países y cuenta con más de 1,000,000 de miembros. En los Estados Unidos, se encuentran capítulos locales de la sociedad en todo el país y en Hawái. La sede nacional está ubicada en Laredo, Texas.
La Sociedad local de Adoración Nocturna en Rupert, conformada ahora por alrededor de 30 miembros activos, quedó bajo el patrocinio de Saint Nicholas, por ello, dedicaron un lugar especial en sus altares a este santo y a San Pascual Baylón quien es el Santo Patrón de la Sociedad de Adoración en todo el mundo. San Pascual fue canonizado en 1690 y nombrado patrón de congresos y sociedades eucarísticas en 1897.
Otra de las actividades organizadas por la Sociedad Local de Adoradores en Rupert para esta Vigilia de Acción de Gracias de la Temporada de Cosecha fue la elaboración de cinco altares con diferentes Santos en el salón parroquial.
El primer altar estuvo dedicado a San Isidro Labrador. Él es considerado patrón de los agricultores y de las comunidades rurales. En particular, es el patrón de Madrid, España, y de la Conferencia Nacional de Vida Rural de Estados Unidos.
El segundo altar fue dedicado a San José Obrero. Esta fiesta extiende la larga relación entre José y la causa de los trabajadores tanto en la fe como en la devoción católica. San José, como carpintero y padre adoptivo de Jesús, es sólo un ejemplo de la santidad del trabajo humano. San José se presenta como modelo de tal labor.
El tercer altar estuvo dedicado a San Lucas Evangelista. San Lucas nació griego y gentil en Antioquía, Siria. Fue el primer médico cristiano y fue venerado por la Iglesia Católica como patrón de los médicos y cirujanos. San Lucas también es considerado el patrón de los pintores porque, según la tradición, había pintado imágenes de María y de Jesús. Aunque más tarde se demostró que esto era incorrecto.
El cuarto altar fue dedicado a la Sagrada Familia, la cual celebra la unidad familiar humana, así como la unidad familiar suprema: Jesús, María y José. La Sagrada Familia también habla de nuestras propias familias. El objetivo principal de este altar es presentar a la Sagrada Familia como modelo para todas las familias cristianas y para la vida doméstica en general. Nuestra vida familiar se santifica cuando vivimos la vida de la Iglesia en nuestros hogares. A esto se le llama la “iglesia doméstica”. San Juan Crisóstomo instó a todos los cristianos a hacer de cada hogar una "iglesia familiar" y, al hacerlo, santificar la unidad familiar.
El quinto altar estuvo dedicado a la Sagrada Escritura. Durante la procesión con el Santísimo se hizo una parada en cada uno de los cinco altares para hacer una oración y una lectura propia de cada altar. Padre Camilo explicó que las lecturas fueron tomadas de Encíclicas de los Papas que se refieren al trabajo laboral.
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